Los sufijos -ísima e -ísimo sirven para formar el grado superlativo de algunos adjetivos, aunque en algunos de ellos se prefiere la formación con la forma culta, a partir de los sufijos -érrimo y -érrima.
1 Acentuación[editar]
Las nuevas formas se rigen por las normas de acentuación habituales en español. Al añadir el sufijo, el adjetivo pasa a convertirse en una palabra esdrújula, con lo cual se acentúa la letra i (-ísima/o).
2 Formas irregulares[editar]
En ciertas ocasiones, se modifica la raíz del adjetivo al añadir el sufijo ísima e -ísimo por razones fonéticas o etimológicas:
- amable - amabilísimo/a
- antiguo - antiquísimo/a
- ardiente - ardentísimo
- bueno - bonísimo/a
- caliente - calentísimo/a
- cierto - certísimo/a
- cruel - crudelísimo/a
- diestro - destrísimo
- fiel - fidelísimo/a
- fuerte - fortísimo/a
- grueso - grosísimo
- incierto - incertísimo
- limpio - limpísimo/a
- noble - nobilísimo/a
- notable - notabilísimo/a
- nuevo - novísimo/a
- reciente - recentísimo/a
- rico - riquísimo/a
- sabio - sapientísimo/a
- sagrado - sacratísimo
- simple - simplicísimo/a (aunque también admite simplísimo)
- valiente - valentísimo/a
También puede haber variaciones por razones ortográficas:
- poco - poquísimo
- loco - loquísimo
No tienen este sufijo:
- célebre - celebérrimo/a
- pobre - paupérrimo/a