Wikilengua
Ir a la navegaciónIr a la búsqueda

El sufijo -dor, -dora forma palabras agudas o llanas, respectivamente, y procede del latino tor (nom. -tor, acusat. -torem), y forma en castellano derivados verbales que denotan el agente de la significación del verbo, y a veces también el instrumento y el lugar. El sufijo viene a ser -ador, edor, idor, según la conjugación del verbo primitivo.

En los verbos en -cir, la terminación puede pasar a -ctor (conductor), y cierto número de femeninos adoptan la terminación -triz (emperatriz).

Un sufijo relacionado que también expresa el agente es -nte (en cierto número de casos incluso alternan ambas opciones, como adorante/adorador).

De los latinos creatorem, imperatorem, etc., proceden los castellanos creador, emperador, etc., y en nuestra lengua los hemos formado a semejanza de estos.

De verbos de la primera

abaleador, ora, de abalear
abarcador, ora, de abarcar
abrevador, ora, de abrevar

Y así abonador, amolador, aferrador, aguijoneador, etc.

De verbos de la segunda:

conocedor, ora, de conocer
hacedor, ora, de hacer
proveedor, ora, de proveer
veedor, ora, del ant. veer

De verbos de la tercera:

adquiridor, ora, de adquirir
conductor, ora, de conducir
fingidor, ora, de fingir
productor, ora, de producir

Estos derivados son todos substantivos o adjetivos que pueden usarse como substantivos.

La terminación femenina de estos adjetivos es de formación castellana, porque en latín al sufijo masculino tor corresponde el femenino trix.

Algunos tienen dos formas: una derivada del verbo castellano, y otra de la radical del supino latino, así: adquiridor, de adquirir, y adquisidor, del lat. acquissitum, supino de acquirere, adquirir; disecador, de disecar, y disector, de dissectum, de dissecare, disecar.

Nótese que en adquisidor y disector el verdadero sufijo es or, con la diferencia de que en el primero hemos suavizado la t en d. También sucede que tenemos el derivado castellano al lado del nombre latino, como producidor (antiguo), de producir, y productor, del latín productorem; defendedor, de defender, y defensor, del latín defensorem. En estos casos hemos desechado, a veces, la forma vulgar, que hemos substituido por la erudita, asi: conducidor, antiguo de conducir, y conductor, forma corriente, de conductorem.

Pero hay casos en que persisten los dos, como disecador y disector, y con significación distinta, cogedor y colector; ponedor y postor; regidor y rector, etc.

Algunas de estas formas dobles proceden ya del latín, como cantador y cantor, de cantatorem y cantorem.

Tenemos algunos formados de substantivos, o sea, que no derivan del verbo por no tenerlo la lengua, como aguador, de agua; babador, de baba; proscuior, de prosa.

También prestidigitador, formado de presto y el latín digitus, ‘dedo’. La significación del primero no conviene a ninguna de las acepciones del verbo aguar. Y en cuanto a los demás, carecemos de los verbos babar, prosar y prestidigitar.

Designan el agente y también el instrumento, significación esta última derivada de aquélla: recogedor, de recoger; prendedor, de prender; pasador, de pasar, inhalador, de inhalar, etc. Y en género femenino ametralladora, de ametrallar, o calculadora, de calcular. Hay dos formas para el derivado de computar: computador y computadora.

Designan el agente y el lugar: comedor, corredor, partidor, mirador, probador, etc., de comer, correr, partir, mirar, probar, etc.

Puede también designar oficio: aguador, leñador, viñador, boxeador, programador.

Referencias[editar]

  • J. Alemany Bolufer, Tratado de la formación de palabras en la lengua castellana, Madrid, Victoriano Suárez, 1920