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La coordinación consecutiva une dos oraciones de modo que la segunda es la consecuencia o el efecto de la primera.

La coordinación causal se convierte en consecutiva cuando invertimos la enunciación de los dos juicios entre los cuales concibe el entendimiento la relación lógica de causa a efecto. Si enunciamos en primer lugar el juicio que consideramos como efecto lógico, tenemos la coordinación causal:

No será tan grave su dolencia, porque anoche lo vi en el teatro

Si enunciamos en primer término el juicio que consideramos como causa, tenemos la coordinación consecutiva:

Anoche lo vi en el teatro, luego no será tan grave su dolencia.

Este orden es de rigor cuando no se emplean conjunciones, pues haciendo uso de éstas puede a veces alterarse:

Porque anoche me vio en el teatro cree que ya estoy bueno
pero al dinero y al interés mira el autor; maravilla será que acierte (Quijote, II, 4).

1 Conjunciones y marcadores[editar]

Las conjunciones coordinantes consecutivas, llamadas también ilativas, son, en castellano: pues, que también es causal, luego y conque, y empleamos además con el mismo valor los marcadores por consiguiente, ahora bien y algún otro:

¿No quiere seguir los consejos de su padre?; pues él lo llorará algún día.
Pienso, luego existo.
Te educó, te dio carrera y te acude en todas tus necesidades
Conque no tienes motivo sino para estarle muy agradecido.
Gasta más de lo que tiene; por consiguiente, no tardará mucho en arruinarse.

Estas conjunciones pueden emplearse también al principio de la cláusula, y denotan entonces que lo que se dice en la oración que encabezan es deducción de lo dicho en la cláusula anterior:

Pues entre ésas debe de estar, amigo, ésta por quien te pregunto (Quijote, II, 9).

La conjunción pues es también continuativa, y nos servimos de ella en las transiciones, para continuar y apoyar la oración:

Repito, pues, que ésa y no otra fué la causa del alboroto.

Con este valor se emplea también al principio de la cláusula:

Pues como iba diciendo
¡Pues no faltaba más!

El mismo valor que pues como partícula continuativa, tiene también la locución conjuntiva así que:

así que, según ya queda visto, no tuvo razón para enojarse.

2 Referencias[editar]

Real Academia Española, Gramática de la lengua castellana, nueva edición, reformada, Madrid, 1917.