Wikilengua
Ir a la navegaciónIr a la búsqueda


Andrés Bello, en su gramática, define los pronombres demostrativos como[1]

... aquellos pronombres de los que nos servimos para mostrar los objetos señalando su situación respecto de una determinada persona.

En la gramática tradicional hay una clara categorización de los demostrativos en adjetivos y pronombres. Sin embargo, en muchos casos la distinción es difusa y por ello la gramática actual los engloba bajo el nombre de demostrativos, sin establecer una frontera rígida entre ambos.

Los demostrativos son un método importante para dar cohesión al texto.

1 Formas[editar]

Los demostrativos se dividen en tres series según la distancia a la que se encuentra lo señalado respecto del emisor. Además presenta variaciones de género y número.

Así pues encontramos estas series:

  • este, esta, esto, estos y estas denotan cercanía de lo señalado respecto al emisor;
  • ese, esa, eso, esos y esas denotan cercanía de lo señalado respecto al receptor;
  • aquel, aquello, aquella, aquellos y aquellas denotan distancia de lo señalado respecto al emisor y al receptor.

Las formas esto, eso y aquello nunca funcionan como adjetivos.

El objeto (persona, situación, etc.) al que se refieren los demostrativos puede ser considerado en el espacio y el tiempo.

El tiempo toma como punto de referencia el momento en el que el emisor realiza el discurso. De este modo:

  • esto, este y esta señalan lo presente;
  • aquel, aquella y aquello señalan lo pasado o lo futuro;
Ayer fue un día agotador; esperemos que este sea más relajado.
El verano apunta alto, ojalá sea como aquel en que nos juntamos todos.

El espacio aparece a lo largo de un relato o un discurso del siguiente modo:

  • esto, este y esta, que se referirán a lo que acaba de mencionarse;
  • aquel, aquella y aquello, que se referirán a lo que se mencionó con anterioridad.
La pequeña María y su amiga discutieron, pues esta quería jugar a la comidita, aquella a la pelota.

2 Tipos[editar]

Leonardo Gómez Torrego hace la siguiente clasificación de los pronombres demostrativos[2].

2.1 Pronombres demostrativos propiamente dichos[editar]

Son las formas neutras esto, eso, aquello.

Esto es lo que hago

2.2 Pronombres del discurso[editar]

Los pronombres del discurso son los que funcionan como pronombres demostrativos si no van acompañados de un sustantivo.

Esta comida es mi favorita. (No funciona como pronombre porque va con sustantivo). 
Esta es mi favorita. (Funciona como pronombre porque no va acompañada del sustantivo).

3 Combinación con otros elementos[editar]

  • Los demostrativos pueden aparecer detrás de la palabra todo y sus variantes toda, todos y todas.
Todo esto era de tu abuelo.
Consiguió librarse de toda aquella tristeza que le afectaba.
  • Pueden estar complementados por grupos encabezados por la preposición de o también por oraciones.
Eso de que ya se verá no me inspira confianza. (Complemento introducido por de).
Aquello que me contaste lo mantengo en secreto. (Oración)

3.1 Combinaciones en desuso[editar]

Los demostrativos de las dos primeras series (esto, eso) pueden combinarse con la palabra otro anteponiéndose a ella. Así, tenemos las formas estotro, estotra, esotro, esotra, etc.

Estas formas aun se usan hoy en día, aunque de forma ocasional, sobre todo en la prosa literaria.

Como equivalentes a los pronombres este, ese, etc. existen las formas, muy usadas en la Edad Media y el siglo XV, aqueste, aquese, etc.

Estas variantes pronto fueron consideradas arcaísmos; sin embargo, el DRAE sigue recogiéndolas.

4 Funciones[editar]

Los pronombres demostrativos pueden hacer todas las funciones del sustantivo excepto la de aposición.

Esto es una maravilla (Sujeto).
Las propiedades de este son enormes (Complemento de un nombre).
No entiendo eso (Complemento directo)
...

5 Como sustantivo[editar]

En la lengua coloquial oral se usan como nombres para aludir de modo genérico a algo de lo que no se recuerda el nombre en ese momento:

Dame el este para abrigarme [puede referirse a una chaqueta, por ejemplo]

6 Ortografía[editar]

6.1 Norma actual[editar]

La Ortografía académica del 2010 recomienda no acentuar nunca los demostrativos, por ser voces llanas acabada en vocal o, en el caso de aquel, aguda acabada en l. Así lo explica en la página 269:

La palabra solo [...], así como los demostrativos este, ese y aquel , con sus femeninos y plurales, funcionen como pronombres (Este es tonto; Quiero aquella) o como determinantes (aquellos tipos, la chica esa), son voces que no deben llevar tilde según las reglas generales de acentuación [...].

No obstante, no considera incorrecto escribirlas con tilde si son pronombres y hay riesgo de ambigüedad. Si no existe tal riesgo, han de escribirse sin tilde, por lo que nunca será incorrecto omitirla; es decir, sin tilde siempre son correctas, pero con tilde como pronombre son incorrectas si no hay doble interpretación.[3]

En los demostrativos el riesgo de ambigüedad es mucho menor que con solo, pues el significado es muy fácilmente reconocible por el contexto y pueden resolverse de manera sencilla.

No llevan tilde, y nunca la han llevado, las formas neutras esto, eso, aquello, que solo funcionan como pronombres.

6.2 Normas antiguas[editar]

La Ortografía de 1969, que incorporaba los cambios de 1959, dice:

Los pronombres éste, ése, aquél, con sus femeninos y plurales, llevarán normalmente tilde, pero será lícito prescindir de ella cuando no exista riesgo de anfibología.

La distinción entre la función adjetiva y pronominal no siempre es clara y ciertos casos han sido objeto de debates entre gramáticos y ortógrafos. Son los que corresponden a estos ejemplos, que quedaban en un vacío normativo, pero que normalmente se han tratado como adjetivos:

el libro ese
es ese el libro / el libro es ese / ese es el libro
ese que está ahí / ese de ahí
ese último, aquel otro
este y otros libros

Dado que las Ortografías anteriores a la actual no precisaban los casos concretos en los que aplicaba la tilde, algunos autores las complementaron con reglas prácticas. Las siguientes son las dadas por Lozano Ribas[4], seguidas muy a menudo en las imprentas de España:

  • Llevan tilde cuando se emplean en lugar de las voces con que se designaría a los seres de los que se habla:
Lo sé porque éste lo dijo ~ porque Luis, porque mi hermano, porque el niño...
Lo que trabaja ésa es ya demasiado ~ lo que trabaja Luisa, tu hija, la empleada...
Poco me importa lo que digan ésas, éstas o aquéllas ~ las de allí y aquí
  • Llevan tilde cuando sustituye a un vocablo que no quiere repetirse:
Alfonso y Eduardo son estudioso, pero éste tiene más comprensión que aquél.
  • Llevan tilde cuando señalan persona, animal o cosa determinada y, sin formar frase sustantiva con lo que sigue, se emplean sin el nombre que debería ir a continuación:
¡Te lo juro por éstas! ~ por estas cruces
Tú no eres como ésos ~ como esos individuos
¡Qué noche aquélla! ~ ¡Qué noche aquella noche!
  • No llevan tilde cuando no sustituyen al nombre sino que lo determinan:
Me fastidia el chico este.
Todavía me acuerdo de aquella noche.
  • No llevan tilde cuando se pueden reemplazar por un artículo:
Si quieres un libro, compra este de las cubiertas azules ~ el de las cubiertas
Benito y Juan son caritativos, pero este último lo es mucho más ~ el último
¡Maldito sea aquel que lo descubrió todo! ~el que lo descubrió
  • No llevan tilde, pues siempre son pronombres, esto, eso, aquello:
Recoge esto, y a casa
Tráeme aquello
¿Qué es eso que hay ahí?

Otras reglas prácticas formulan la distinción de otro modo: llevan tilde cuando sustituyen al nombre, pero no la llevan cuando acompañan y determinan a un nombre. Sin embargo, presenta lagunas, como en el siguiente ejemplo de la Ortografía de 1999, donde la tilde depende del sentido o de la función de la palabra que le sigue:

Dijo que ésta mañana vendrá ~ que esta mujer, que esta niña [mañana es adverbio]
Dijo que esta mañana vendrá ~ la mañana de hoy [mañana es nombre]

Tampoco decide casos como ese último, pues último puede usarse sustantivado, ni tampoco es ese un buen libro. Los ejemplos anteriores puede desambiguarse con una simple rerredacción, que además siguen la construcción regular:

Dijo que esta vendrá mañana
Dijo que vendrá esta mañana

7 Notas y referencias[editar]

  1. Bello, Andrés Gramática de la lengua castellana, «Pronombres personales», en Cervantes Virtual
  2. Gómez Torrego, Leonardo, Gramática didáctica del español. ISBN 84-348-5440-6
  3. RAE en Twitter
  4. M. Lozano Ribas, Gramática castellana para el uso de tipógrafos, 3.ª ed., Mateu, ¿194-?, pp. 135-140
  • Real Academia Española Esbozo de una nueva gramática de la lengua española, Ed. Espasa Calpe. ISBN 84-239-4759-9
  • SECO, Manuel Gramática esencial del español Introducción al estudio de la lengua, Ed. Espasa Calpe. ISBN 84-239-6899-5
  • La tilde en los demostrativos y en solo, de Pedro Álvarez de Miranda, en el Centro Virtual Cervantes.