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El sufijo -eo aparece principalmente en tres contextos, de los cuales modernamente solo es realmente productivo, y mucho, el tercero:
- para expresar similar materia o una relación parecida, y son palabras esdrújulas: aúreo, hercúleo;
- patria, tribu o secta, y son voces llanas: hebreo, caldeo;
- sustantivos de los verbos en -ear, y son también voces llanas: canturreo, baboseo, tiroteo, zapeo.
Además es una terminación de algunas formas verbales (creo, leo).
1 En palabras esdrújulas
Como tal sufijo, solo lo vemos en nuestra lengua en albarráneo, acotiledóneo y espélteo, derivados de albarrán, acotiledón y espelta, y también en albugíneo y el antiguo origíneo. de los latinos albugo, inis, y origo, inis.
Los demás adjetivos que tenemos con esta terminación son latinos y, por ello, de procedencia erudita, que han pasado al castellano cambiando en o la terminación us del nominativo de singular. Así, arbóreo, áureo, céreo, marmóreo, plúmbeo, plúmeo, silíceo, férreo, etc., son en latín arboreus, aureus, etc. Denotan estos adjetivos que el substantivo con el que conciertan es de la misma materia que el substantivo primitivo, como se ve en marmoreus de marmor, ‘mármol’ .
En los vocablos vulgares, el sufijo latino eo cambió en io, como vemos en vidrio del adjetivo latino vitreum, en vez del antiguo vidro, que procede del substantivo vitrum; y así haya del adjetivo fagea, derivado de fagus, haya; juncia, del adjetivo juncea, derivado de juncus, junco; caño (canio), del latín caneus. Asimismo del latín linea, tenemos línea. y liño.
2 En palabras llanas
Exceptuando los que derivan de verbos en -ear, los demás nombres castellanos con esa terminación son de procedencia erudita, y quizá fuera de alcaloideo, derivado de alcaloide, que debiera ser esdrújulo y pasar a eo átono, no tengamos ningún otro formado con este sufijo; pues los que así terminan proceden todos de nominativos latinos en aeus o eus, con el solo cambio de estas terminaciones en eo.
Así caldeo, cananeo, eritreo, febeo, filisteo, hebreo, jebuseo, saduceo, etc., son en latín chaldaeus, cananaeus, erythraeus, phoebeus, philistaeus, hebraeus, jebusaeus, sadducaeus, etc., todos los cuales denotan la patria, tribu o secta a que pertenece el substantivo a que se refieran.
Con otra significación tenemos además jubileo y museo, de jubilaeus y museum.
3 Referencias
- J. Alemany Bolufer, Tratado de la formación de palabras en la lengua castellana, Madrid, Victoriano Suárez, 1920