Un deíctico es una palabra o frase como yo o aquí, que no pueden entenderse completamente sin más información contextual; en estos ejemplos son la identidad del hablante y su ubicación, respectivamente. El fenómeno se llama deixis.
Las palabras son deícticas si su significado semántico es fijo, pero su significado denotativo varía dependiendo del tiempo o del lugar. Las palabras o frases que requieren información contextual para transmitir cualquier significado, como los pronombres, son deícticas.
La deixis está estrechamente relacionada con la anáfora y la cohesión.
El origen del término es el griego clásico: δεῖξις (‘exhibición, demostración, o referencia’).
Son deícticos:
- de persona: yo, mi, su;
- de lugar: aquí, allí, este, aquel;
- de tiempo: ahora, entonces, pronto;
- de cantidad: tanto (‘esa cantidad’);
- de modo: así (‘ese modo’).